Aún con 40 años de carreras sobre mis espaldas que me han proporcionado multitud de experiencias y experiencia, corriendo y disfrutando, me siento identificada con la curiosidad de todas las mujeres que ahora han descubierto esta afición y las expectativas que da la posibilidad de salir a la calle y simplemente correr, correr tras lo que cada una de nosotras anhelemos o deseemos, tras cada sueño y cada ensueño, alegres y felices frente a ese mundo que se nos brinda con la avidez del principiante, con la ilusión de la niñez, ese universo personal y social, individual y colectivo, independiente y compartido.
He visto a lo largo de todos estos años cómo las mujeres hemos ido ganando espacio, pasito a paso como gotas que de forma constante dejan su huella inquebrantable, en todos los campos. Siempre he sabido la fuerza que tenemos, siempre he sido consciente de nuestro valor. Una actividad como es correr no debía quedar fuera del escenario por conquistar, no podemos y sobre todo no debemos quedarnos rezagadas, en retaguardia, debemos estar delante donde se libran las batallas.
Tras la grabación de este documental, tras reencontrarme con mujeres que he admirado tanto como Carmen (Valero) y Pilar (Fernández) y conocer el futuro de las zancadas femeninas en la persona de Ana (Lozano), que tantas alegrías deportivas nos dará, me siento como un enlace entre el pasado y el presente dentro de un deporte, el de correr, apasionante, tanto que yo no he sido capaz de abandonarlo nunca desde que, en mis inicios, subía cuestas y contaba piedras. Muchas más cuestas he subido a partir de entonces, y muchas pendientes he bajado para emprender de nuevo la marcha.
Con 20 años era una esponja capaz de absorber con los cinco sentidos todas las sensaciones que se presentaban ante mí, y con el paso del tiempo sigo sabiendo que aquello que en su día me hizo dichosa sigue con el paso de las décadas teniendo un espacio en mi vida. Pues sigo sintiendo ese afán de superación, que adapta mis zancadas a los años, que persiste aun cuando la cadencia disminuye.
Por eso me gustó la oportunidad de mostrar lo que algunas llevamos muchos años aprendiendo y de alguna forma trasmitirlo a todas esas mujeres que se incorporan, y quise asimismo aprovechar la posibilidad que nos daba a las más veteranas de recordar toda la ilusión que tuvimos en su momento y que vemos ahora reflejada en tantos rostros nuevos de todas las edades y condiciones. Mujeres contentas de ser ellas mismas, con un futuro por escribir y algunas también con un pasado que contar y compartir.
Sí, yo me siento muy afortunada por compartir esta pasión y por la ocasión de revivir los recuerdos que han marcado mi vida desde aquellas piedrecitas que anotaban mis primeros esfuerzos. Porque he comprobado que recordar es en parte volver a vivir, y la memoria es el acicate que hace que no muera el entusiasmo.
Por eso quiero agradecer a las #mujeresquecorren haber reavivado mis recuerdos. ¡Gracias! por haber sido para mí la mirada hacia ese pasado feliz que el presente necesita para seguir avanzando y buscando el futuro.
Fotos: Silvia Domínguez Vidal
Aurora Pérez
Atleta
Aurora Pérez es la atleta master más laureada de España y una de las protagonistas del documental Mujeres que corren.